LA SOBERANÍA CULTURAL

Etimológicamente la palabra soberanía deriva del latín “super” (sobre – encima de) y el sufijo “anus” (perteneciente, procedencia, relación e identidad) lo que se puede inferir a algo que tiene importancia sobre todas las cosas, pero también, a la importancia que tiene el hecho de ser perteneciente o en relación a una identidad o cultura.
El concepto soberanía no nos habla, ni nos impone, estar sobre nadie, sino y fundamentalmente, que nadie esté sobre nosotros.
Podemos reconocer antes que nada, entonces, que la soberanía, va mucho más allá de la defensa armada de nuestro territorio, es mucho más que la independencia política y económica. Es también y primordialmente la preservación del patrimonio cultural tangible e intangible, para nuestros hijos y para todas las generaciones que vengan y/o los hombres y mujeres que quieran venir y habitar este suelo en paz y libertad.
La soberanía cultural es: "cuando un país o nación no necesita del exterior para generar cultura - y esa cultura que promueve es genuina y no implantada", aunque el tema es mucho más complejo.
Decía José Gervasio de Artigas "La soberanía no se discute, se defiende" y esta es la ley primera... ya que nuestra cultura es la primera línea de defensa y la última posición que no debemos entregar nunca.
Si perdemos nuestra cultura, se pierde el sentido de pertenencia y de identidad... cuando eso pasa y está pasando, se diluyen los valores morales, las consignas sociales, la solidaridad por el hermano y fundamentalmente el amor a la patria.
Francis Bacon decía que "La soberanía del hombre está en la dimensión de sus conocimientos" y no hay mayor y mejor conocimiento que el de sí mismo y de su entorno, su propia cultura. Por esta simple razón decimos que “No se puede querer lo que no se conoce y menos se puede defender lo que no se quiere”
Soberanía es educar y esto significa consolidar el concepto de independencia conjuntamente con el de emancipación. Hay que hacer pueblo, hacer dirigentes, formar republicanos sobre la herencia de los hombres y mujeres que dieron su vida por la libertad y los derechos humanos.

¿Cómo puede ejercer soberanía un pueblo no preparado?. ¿Qué soberanía puede ejercer un pueblo ignorante y empobrecido?.

Por último, y lapidariamente remato las palabras de Osvaldo Pugliese: "La soberanía nacional se defiende, antes que nada, con la educación y la cultura".

José de Guardia de Ponté

 
 
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No se puede querer lo que no se conoce y no se pueede defender lo que no se quiere